Con tantas cosas que hacer, es probable que pases a las técnicas de relajación al asiento trasero de tu vida, pero eso significa que podrías perderte de los beneficios de salud de la relajación.

Practicar técnicas de relajación puede reducir los síntomas de estrés al:

  • Reducir tu frecuencia cardiaca
  • Reducir tu presión arterial
  • Desacelerar tu frecuencia respiratoria
  • Aumentar el flujo sanguíneo hacia tus músculos mayores
  • Disminuir la tensión muscular y el dolor crónico
  • Mejorar la concentración
  • Reducir el enojo y la frustración
  • Reforzar tu confianza para manejar los problemas

Tipos de técnicas de relajación

No importa qué técnica de relajación escojas. Lo importante es que intentes practicar la relajación con regularidad para cosechar los beneficios. Hay varios tipos principales de técnicas de relajación que incluyen:

Relajación autógena. Autógeno significa algo que viene de tu interior. Puedes imaginar un lugar tranquilo y luego concentrarte en una respiración controlada y relajante que reduzca tu frecuencia cardiaca, o sentir diferentes sensaciones, como relajar cada brazo o pierna, uno por uno.

Relajación muscular progresiva. En esta técnica de relajación, uno se concentra en tensar y relajar poco a poco cada grupo muscular.

Visualización. En esta técnica de relajación se forman imágenes mentales para realizar un viaje visual a un lugar o una situación pacífica y calmante.